jueves, 1 de marzo de 2012

PROTEGERSE CONTRA LA OXIDACIÓN


No os creáis que vamos a hablar decoches o bicicletas cuando pasamos de correr de forma moderada a hacerlo deforma intensa, surgen una serie de riesgos que hemos de asumir y, por supuesto,combatir si no queremos que nuestra salud se vea resentida ¿por qué digo esto?En menos de tres semanas correremos la Maratón de Barcelona y quizá venga bienque entendamos como nuestro cuerpo se ha comportado los últimos meses.
Quizás el riesgo principal que corremoscuando realizamos ejercicio intenso es la elevada producción de RadicalesLibres.
Seguramente, este término os suenedebido a la popularización de productos antienvejecimiento que se publicitan enlos medios de comunicación con el objeto de combatir los efectos de estosRadicales Libres causantes del stress oxidativa, que a su vez es determinanteen los procesos degenerativos del organismo y del envejecimiento.
Los Radicales Libres son átomos muyinestables que producen daños en las células del organismo. Podríamos decirque, paradójicamente, son el resultado de tener que utilizar el oxígeno paravivir, ya que cuando respiramos solo utilizamos el 95% del oxígeno queintroducimos en nuestro cuerpo, siendo el resto el causante de la formación deestos Radicales Libres.
Existen muchas enfermedades relacionadascon la acumulación excesiva de Radicales libres, como el cáncer, elenvejecimiento prematuro, patologías cardiovasculares o degenerativas como elalzheimer, el parkinson o la esclerosis múltiple.
Cuando realizamos ejercicio, lafrecuencia respiratoria aumenta, pudiendo ser entre 12 y 20 veces superior a lade una persona en reposo, por lo que también aumenta la producción de RadicalesLibres y por tanto el daño celular. Afortunadamente, el organismo cuenta conmedios de defensa para combatir naturalmente la acción nociva de estoselementos y por tanto el stress oxidativo. Estos medios son los antioxidantes
como las vitaminas C y E que nuestrocuerpo sintetiza para protegernos de la oxidación excesiva.
Curiosamente, realizar ejerciciomoderado y por supuesto continuado, contribuye positivamente a que nuestrocuerpo mejore su capacidad para generar antioxidantes y por tanto a combatir laacción negativa de los Radicales libres. El organismo se adapta de formaprogresiva mejorando su capacidad de defensa.
Cuando pasamos del ejercicio moderado alintenso, o al excesivamente prolongado, esto irremediablemente estaráacompañado de un significativo aumento de la demanda de oxígeno, lo que portanto aumentará el riesgo de que nuestro sistema no sea capaz de mitigar lasuperproducción de Radicales Libres y como consecuencia se produzca unimportante daño celular.
Ello se traduce a nivel práctico en laaparición de problemas musculares derivados del daño celular, algo que suele irunido a un descenso de las prestaciones y a una recuperación de los esfuerzosmás lenta.
Cabe pensar que los corredores veteranosson más susceptibles a sufrir los daños producidos por la acumulación de losRadicales Libres, ya que su sistema de producción de defensas ha perdidoefectividad con los años.
Por tanto hemos de tener en cuenta queel hecho de entrenar de forma intensa comporta ciertos riesgos comoconsecuencia del daño celular provocado por el constante y gran desequilibriocausado por el aumento del stress oxidativo y la insuficiente capacidadantioxidante del organismo.
Detrás de todo esto puede estar laexplicación a muchos de los problemas que suele soportar el corredor queentrena con cierto nivel de exigencia y padece lesiones a veces inexplicables,súbitos descensos del rendimiento, estados de agotamiento continuados e inclusola aparición de ciertas enfermedades.
Una dieta equilibrada y sobre todo nocarente de todos aquellos productos especialmente ricos en elementosantioxidantes, como son las verduras, las frutas frescas y ciertos frutos secosserá determinante para contrarrestar en gran medida los efectos nocivos que puedatener el ejercicio intenso mediante el aporte de las vitaminas y minerales queconforman los principales medios antioxidantes del organismo, ya sea lavitamina C, E o el Beta Caroteno.
De igual manera, es importanteconsiderar que una dieta hipercalórica contribuirá a la producción de RadicalesLibres, ya que a más calorías más necesidad de oxígeno, por lo que el riesgo deoxidación también aumentará con la sobrealimentación.
Existen corredores que entrenan concierta intensidad y que arrastran carencias alimenticias sobre todo en loreferente a todos aquellos productos que reseñábamos antes como necesarios paramantener el nivel de antioxidantes en buen estado, y otros que continúanentrenando duro a pesar de contar con una edad avanzada.
En ambos casos puedeser muy conveniente buscar el aporte de estos elementos antioxidantes medianteuna correcta suplementación, mejor si es pautada por un experto en nutricióndeportiva. No hemos de olvidar que ciertas lesiones y enfermedades, muyfrecuentes cuando entrenamos duro, suelen ser consecuencia precisamente delecho de entrenar duro, del exponer al organismo a esfuerzos de los que no puederecuperarse por si solo, es decir, de romper el equilibrio entre lo que hacemosy lo que somos capaces de soportar.
Venga a entendernuestro cuerpo, cuidarle y meterle caña !!!!


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